sábado, 31 de julio de 2010

¡VACACIONES!


Todo el año esperando por el verano, por las vacaciones, y… ¡llegaron! Me pillan en esta ocasión un poco…digamos contracorriente; el invierno me ha traído unas cuantas decepciones encadenadas y esperaba con ansia este mes de agosto, confiando que me serviría para cargar de nuevo esas pilas emocionales que son las únicas que dan sentido a la vida. Pero, de momento, estoy sin saber muy bien qué hacer. Si lo que me conviene es irme a alguna parte o quedarme junto a mi playa. Las ofertas de viajes son tentadoras, han bajado los precios, los destinos son casi infinitos. Pero yo no acabo de decidirme. Me gustaría perderme unos días por algún país europeo, pero también me gustaría hacerlo por nuestros Picos de Europa, por esos paisajes que tanto adoro y que me hacen sentir tan cerca del cielo. Casi siempre programo con antelación; en esta ocasión no lo he hecho, y he tenido unas cuantas oportunidades. Ahora el que más y el que menos ya ha elegido su destino, y yo sigo dándole vueltas. La verdad es que ando un poco baja de ánimos, me va a costar remontar de nuevo el vuelo. Pero lo conseguiré, estoy segura. Un día cualquiera prepararé mi maleta y saldré hacia no importa qué destino. No es que piense que en vacaciones tenemos necesariamente que desplazarnos, si lo pensáramos un poquito nos daríamos cuenta de la tontería que es viajar cuando lo hace todo el mundo, parecemos rebaños de ovejas atravesando España, pero las vacaciones son cuando son. Y, en realidad, lo que hacemos casi todos es una huída de la realidad cotidiana, buscando algo mejor que no siempre se encuentra. Pero es lo que hay. Supongo que mis amigos blogueros se habrán ido ya, o estarán apunto de hacerlo. Pues nada, amigos, que lo paséis muy bien donde quiera que estéis. Nos reencontraremos, si así lo deseáis, de nuevo en septiembre. ¡Divertiros! Y…, lo más importante, volver a casa.

2 comentarios:

  1. ¿Y a Altea?...o esta muy cerca de Benidorm....Las vacaciones son para cansarse de otra manera o como tu dices para huir de lo cotidiano...en cualquier caso ¡¡¡se feliz estes en donde estes¡¡¡

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  2. Pues sí, no cabe duda que Altea es un buen lugar. Además allí tengo mi segunda casa. Pero...¿Y la ola de calor qué? Y, ciertamente, no deja de ser arriesgado que ande por allí el de Benidorm que tanto se mete conmigo. ¡Quita, quita, que lo que menos falta me hace ahora es un señor. Y menos si pasa la vida censurando cuanto digo. Por cierto, ¿Y tú quién eres, querido anónimo, que tanto velas por mí? ¿O acaso quieres largarme para Benidorm? Tranquilo, no soy molesta.

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