viernes, 29 de noviembre de 2013

ÁNGEL AZNÁREZ SIGUE ANUNCIANDO -esta vez para el próximo domingo, 1 de diciembre- dos artículos. UNO EN LA PRENSA CONVENCIONAL Y OTRO EL LA DIGITAL, "RELIGIÓN DIGITAL"


El de la convencional es como un cajón de afilador de pianos; tiene púas, alicates, tornillos y botones, teclas, sujetadores de corbatas, corta-uñas, y dulces para chuparse los dedos, muy importantes en un afilador de pianos. Para que los futuros lectores se hagan una idea, siempre aproximada, del contenido del artículo, empieza con caballerías culonas y termina con el cantante Antonio Molina. En medio, otros cantantes, Los Sabandeños, con su Pajarito, Pajarito, Pajarito, canario, canario.
"UN TRENECITO PERSA"
El de la Digital, también muy serio; es la 4ª Parte de una serie sobre “Los Divorciados y la Comunión”. Tiene profundidades de Altura, con arrebatos de Teología. Eso no ha de impedir –al contrario es muy apropiado- que tal artículo vaya acompañado de una fotografía importante e interesante, en la que se ven muchos espárragos, muchos, incluso para freir.


"EL REY JERJES ENTRE HUMOS"
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Una vez escrito lo que antecede, vuelve a repetirse el rinrinrin del teléfono, como el de la semana pasada y a la misma hora; ronco como un ronquido.

--Diga, diga, dijo ella.

--No, no, diga usted, que es la que llama, dijo él.

--¿Cómo esta usted?, dijo ella.

--Yo muy bien, cariño mío, dijo él.

   Y dijo ella:

--¿Por qué me dice lo de “cariño mío“, si no sabe quién soy ?

Dijo él:

--Porque me gusta ser siempre cariñoso al principio, a ciegas como las citas, siempre al principio, no al final, que es difícil, pues quedo en ese vacío, como de romanos (vacuuuuum), y que los hombres tratamos de llenar con humo, mucho humo.

…Dijo ella:

--¿Usted cree que el vacío ese -el vacuuuuum, suyo o de los romanos. se llenará a partir de ahora con humos de vapor, de esos nuevos cigarrillos, que más que pitillos parecen plumas, plumas estilográficas?

Dijo él:

--¡Ay, ay, mucho humo de vapor, mucho estilo y poca grafía, no obstante tanto espontáneo escritor, pero nada, nada, humo sin carbonilla, como el Sporting y ese Sandoval, el entrenador, tan de Ruiz Mateos y de su familia!

Dijo ella:

--Pues a mí no me gusta nada, nada de nada; ahí en la esquina mi pareja o aparejo, en la tumbona, a calzón quitado, y ahora con plumas en la boca, y yo en la mesa camilla caliente por el brasero…

Y ella, cambiando bruscamente de tema tan desagradable, preguntó:

--¿Y lo de ese tren tan raro –la foto- tan pequeño y con tantos elefantes?

            ...Volvió a responder él:

--Ese tren es de mucho enigma. Si toca usted la tecla del aparato para aumentar la imagen, verá, en el cartón marrón, debajo del tren, unas palabras muy raras, rarísimas, que son palabras persas, del país de Khomeini.

Dijo ella:

--No entiendo nada

Dijo él:

            --No me extraña, “mi” tampoco comprender.

Y continuó él:  

--Es mas extraño aún si le cuento que, por fotografiar ese tren, en una calle de Teherán hace tres años, me detuvieron unos Guardianes de la Revolución durante unas horas, pensando que yo era enemigo de ellos, un Yanqui, o Yankee. 

Dijo ella:

            --¡No me diga!

Dijo él:

--Pues como lo oye

Preguntó ella:

--¿Y para qué fue allí?

…Dijo él:

--Para poner una flor en la tumba de Xerxes I, rey de Persia, hijo de Darío, sin parentesco con mi excelente compañero de tertulia en la Televisión del Principado hace mucho llamado Darío, asesor y economista de no sé si de CC.OO o UGT.

…Volvió a decir ella: 

--No me diga.

Volvió a decir él:

--Pues como lo oye

Volvió a preguntar ella:

--¿Y como se libró de los ayatollahs?

Contestó él:

--Rezando, vida, rezando.

Y continuó él:

--Anda, amor, no me preguntes más ¿tienes un cigarrillo de los de humo y carbonilla, no de los de pluma y vapores de agua?

Y transcurrido un ratito, él preguntó a ella, como con temor:

--¿Gozaste, vida?

Respondió ella:

.--¡Ay, ay, uf, uf, uuuufff! Tengo que colgar el aparato; tengo una clase en un taller de literatura en el que me apunté y hoy toca que nos expliquen cómo hacer pareados!

Dijo él:

--Déjese de pareados y que le expliquen los tercetos, siempre los tercetos, que son más entretenidos, estén encadenados o no, y sobre todo no olvide los infinitivos: antes de dejar entrar, dama mía, siempre y previamente, dejar salir; en caso contrario ¡qué barullo!

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 FOTOS DEL AUTOR

jueves, 28 de noviembre de 2013

GIJÓN SERÁ "CIUDAD AMIGA DE LA INFANCIA EN EL 2014"

EL PROGRAMA DE UNICEF, "CIUDADES AMIGAS DE LA INFANCIA", PROMUEVE LA COLABORACIÓN MUNICIPAL EN RED EN FAVOR DE LOS LOS DERECHOS DE LOS NIÑOS, Y SON YA OCHO LOS MUNICIPIOS DEL PRINCIPADO QUE SE HAN INCORPORADO AL PLAN
Foto de la presentación del plan en Somiedo
La incorporación a esta red supone la creación de un Plan de Infancia municipal y de un Consejo de la Infancia, encargado de promover una mayor participación de los niños en la vida pública de Gijón. El sello de Unicef también compromete al Ayuntamiento a impulsar todo tipo de políticas tendentes a favorecer el desarrollo de los derechos de los niños. Esa es la propuesta que hizo públicamente ayer la alcaldesa. 

El objetivo de esta iniciativa es promover la aplicación de la Convención sobre los Derechos del Niño en el ámbito local a través del trabajo conjunto con entidades locales españolas.

En el marco de un interés común por la infancia, el programa insta a Administraciones y Gobiernos locales a desarrollar e implementar estrategias relacionadas con el bienestar de los niños, defendiendo sus derechos, fomentando su participación y haciendo de las ciudades entornos más habitables por todos, especialmente para los más jóvenes.

Desde su instauración a nivel internacional en 1996, 750 ciudades han sido reconocidas como Ciudades Amigas de la Infancia en todo el mundo.

Para llegar a ser Ciudad Amiga de la Infancia es necesario seguir unas líneas de actuación. Entre ellas, trabajar con la infancia del municipio a través de una participación real de los niños en la toma de decisiones, tanto a través de Consejos de Infancia como de Foros Estables de Participación Infantil en Ayuntamientos. Paralelamente, previo análisis y evaluación de las políticas implementadas y sus presupuestos, se impulsa la planificación y puesta en marcha de las nuevas estrategias que tengan en cuenta los intereses de la infancia en todas las áreas del municipio.

domingo, 24 de noviembre de 2013

"TENGO UN AMIGO EN GIJÓN", artículo del notario ÁNGEL AZNÁREZ ("LA NUEVA ESPAÑA, 24/11/13)


Fantasma, pajarito y flor
Mi amigo es un prócer, casi como el Prócer genuino (Jovellanos), éste nacido viudo, siempre triste y rodeado en Gijón de fantasmas y vampiros ¡Qué bien hicieron los de la Casa Natal en comprar el “cajón de los vampiros”, aunque para encerrar a tantos fantasmas maulas, se necesitarán baúles! Mi amigo, el prócer no el Prócer, es escritor de libros y libretas, y presenta a otros con bombo y platillos y panderetas y carracas. La última presentación fue la de otro prócer, mi Pepín, que no bastándole ser una Braña y presidir no una Peña sino muchas, las célebres “federadas” del Sporting, quiere -ambicioso él- ser el psiquiatra de Dios ¡Dios me perdone! Las depresiones de Dios es el título de su último parto u oscuro alumbramiento. Es que Pepín, una de dos: o está loco - es un tarumba-, o es un poeta.

Mi amigo –que no es boticario- reúne en la trastienda de su tienda, entre tarros y tarrinas, mejunjes y potingues, a la “crema de la crema” de la sociedad gijonesa, que, por tanta crema, llamo la de los petisús o piononos. El liderazgo es de antiguos alumnos de jesuitas, que, por eso mismo, casi todos tienen discernimiento. Entre tanta aristocracia, reconozco mi plebeyez al haber sido maleducado en Oviedo por frailes menores y de babero, que me enseñaron el Catecismo a bastos. En todo el cotarro, soy un tercero, como Lucio Apuleyo, el del Asno de Oro. -¡Jolines! es que ni puedo ser de los Antiguos Alumnos del “Inmaculada”, como don Ceferino Menéndez que es autoridad ahí, también amigo, y de veraneos majoreros en Fuerteventura, que es detalle de dandí, dandí o dandi.

Mi amigo, el primero y no dandi, recientemente, en uno de sus escritos o billete de periódico, me citó con una frase mía: “que los gijoneses tienen una pulsión “freudiana” (esta palabra la escribiría el doctor Braña, el de las Peñas), que consiste en acabar con todo lo guapo que la naturaleza dio, que fue mucho”. Y lo guapo –añado- puede ser lo mismo de cosas o que de personas. Así, hasta que El Rinconín no se convirtió en una Rinconera, no pararon; la bella Escalerona ahí la tienen, un adefesio, convertida en retrete para hacer pipí. Y un aviso: que la Estación de ALSA, por bellezón, cualquier día van a acabar con ella y a lo bestia, que es hacer pisos.

Con las personas pasa lo mismo: ¡las guapas, “a por ellas”! Que la Alcaldesa Moriyón no lo dude: si un día le quitan el sillón, no será por pérdida de sus instintos e inteligencias, sino por guapa, guapa. A mi compañera escribana, Dora –prefiero llamarla Menodora, que es nombre como de emperatriz bizantina- no dieron puntapiés y punterazos a su escribanía, la municipal, por faltas de fedataria de mala fe, sino por guapa, sólo por guapa.
Comadre, no comadrona

A Begoña Piñero, jefa de comadres, que vive, como buena comadre, rodeada de genitales (tiene una tienda de flores, flores que son los genitales de las plantas), ya la estoy oyendo protestar porque discrimino y no escribo de guapos gijoneses. A propósito, Begoña, también como buena comadre, es de armas tomar, pues acaba de tener un ri-fi-ra-fe u órdago con el Obispo, lo cual me sugirió un dialogo, Dialogo entre el Obispo y la comadre, que podría ser de comedia, no de capa y espada, sino de capa (por el Obispo) y de bolillos encajados (por la comadre).

Y oyendo a Begoña, la Piñero, veo a Begoña Hüergo, que fue concejala de los policías, que parecía dura como un policía, y era –es- delicada como una begonia flor y roja como una buganvilla. Y estoy “viendo” a otra Begoña, a otra concejala, Begoña Fernández, que, por su semblante de mística, parece estar siempre como de Primera Comunión, y a la que regalaría rosas amarillas y un lirio. Y para delicias, además de las Begoñas, los cachopos gigantes, a compartir por longitud y volumen, de La Begoñina, taberna o barín, en Cimadevilla de Gijón.

 Es que Gijón, respetado público, es la ciudad de las “Begoñas” y de la Virgen de Begoña; que, por eso, sólo por eso, es como la ciudad de Bilbao, aunque mucho menos bruta por no ser vasca, y no ser los gijoneses tan brutos como los vascos de Bilbao, ahora Bilbo para evitar lo de Bilbado, que es de pijería analfabeta.

Y vayamos ahora con los guapos. Hay uno, muy convencido de serlo y estarlo, que porta un prendedor-sujetador no abajo sino arriba, a la altura del nudo de la corbata; eso que es de efecto estético, también puede ser de prudencia, pues si hay un brusco desplazamiento de abajo arriba, arriba, los de abajo, ya tienen donde agarrarse. En cualquier caso, el del prendedor y nudo gordo de corbata, que ande con cuidado, pues por exceso de estética, cualquier día, los gijoneses se “los” amputan. Otro caso es el de ese, no sé si también Conde o marqués, al que recientemente las autoridades locales mandaron a hacer gárgaras con polvorones; y que sepa, que su generosa oferta de papeles historiados para el Municipio, fue rechazada por ser el oferente, conde o marqués, un apolíneo o simétrico, de arriba a bajo, de la copa a la raíz. No es frecuente que un latifundista, conde o marqués, sea simétrico, pues los de tal clase, por imperativos de cromosomas y mecánicos –que eso son las herencias- a menudo, son bizcos o tienen una oreja mayor que otra.

Mobiliario urbano todo-junto y estético
Y mi amigo, el del principio y prócer ¿Dónde está? ¿Dónde estás, amigo mío? ¿Acaso en Casa de Ataulfo que cocina comestibles y no restaura incomestibles, y que es visigodo de nombre, por eso su buena cocina es gótica, como una catedral gótica? No, no, seguramente estará en la droguería, sita en la cristiana calle del moro Munuza, vendiendo jabón Chimbo o Lagarto, piedra pómez, venenos contra la tiña, artículos de barbería para fregar barbas o lociones capilares para copas o cabezas resecas como las de los árboles desplumados.  

Para cazar brujas o hechiceras brujas







Mi amigo gusta que se le llame droguero; y a eso, yo me niego. Para mí, el amigo, es mucho más; es todo un alquimista como los genuinos, los de la Edad Oscura. Y repare el lector que la decoración de los escaparates de su droguería es a base de escobas patas arriba, inversas o al revés, como son las de las brujas, sean brujas con pirulí o sin él.

Convencido estoy de que en noches, de mucha luz o lúgubres, mi amigo cumple como Dios manda, y eso aunque es de los inmaculados y de la Asociación de los antiguos. Y convencido estoy que convierte, por arte de alquimia, sus muchos polvos, sean de lo que sean, de talcos blancos o de yesos amarillos, en oros, en oros; unas veces a lo bruto y otras a lo pulido y suave: pepitas pulidas, de oro, de oros.

Mi amigo prócer ni compra ni vende oro, lo hace por arte de alquimia
Mi amigo, prócer, polígrafo, presentador, sanitario, alquimista, distribuidor de Titanlux, y con número de matrícula en la Cámara de Navegación por empresario, se llama Alfonso Peláez, y yo le llamo mi querido Alfonsín.

FOTOS DEL AUTOR


viernes, 22 de noviembre de 2013

ÁNGEL AZNAREZ, para el próximo domingo 24 de noviembre, fiesta de las Santas María y Flora, ANUNCIA:

¡Qué será, será...lalalá!
            Que aquí, en lo digital, después de desayunar, y allí, en lo periódico, desde la madrugada, se publicará un artículo del autor. Sólo debo decir que empieza con vampiros y que termina con un número de matrícula ¿Será la de los vampiros?
                                                         .........................................
           
Y antes, el siguiente diálogo de mucha lógica y con ojos de pez de roca:

Se oye un rinrinrín telefónico, ronco como un ronquido.

--Oiga, oiga –dijo ella-.
           
--Diga, diga, al aparato –dije yo-.
           
--¿Y por qué lo de la foto?… –preguntó ella-.
           
--No sé bien, no sé bien –respondí -.
           
--Pues si no lo sabe usted que es el autor o el actor…-dijo ella-.

--Es un decir, señora mía –seguí explicando -, que como el domingo será  fiesta de una Santa precisamente llamada Flora, lo mejor, tal vez, es una foto de una floristería.

--Pero no, no, no es por eso –precisé-, que será posiblemente por tratar de asuntos de sexo.

--Pero, ¿cómo que de sexo? –repreguntó ella con cara compungida, como recién salida de la incubadora o del sleeping-. Es que -siguió- mis estados, el civil y el militar, son lastimosos, pues no sé, ni lo que soy, ni lo que estoy: si casada, viuda, divorciada, con matrimonio nulo o putativo. Y eso del sexo, ya sabe usted que muchas veces no levanta lo que tiene que levantar y otras veces traspasa hasta techos y pirámides…

--A propósito ¿Usted cree –volvió ella a preguntar- que seré putativa?

--Yo qué sé –contesté-; que eso lo deberá usted preguntar a la Curia y a las curias, que los que allí trabajan son unos artistas, que todo lo hacen, todo, por amor al arte.

--Y añadí: ¡Cuánto siento, cuánto lo suyo! Permanezca tranquila, que creo –balbucí yo volviendo a lo del sexo- que del sexo fetén no se tratará en el artículo. Será del sexo de las plantas, -continué- que eso, eso, son las flores, genitales de plantas, mi muy estimada famélica; que también las flores tienen pétalos, ovarios y filamentos como usted, y de muchos colores, no sólo marrones.

--¿O sea –preguntó ella- del sexo de las plantas?

--Naturalmente, naturalmente, del sexo botánico, –afirmé yo-. No va a ser –sólo faltaría- del sexo de los ángeles, que es el mío, que soy Angel, y de los buenos, no de los hijos de Satanás, que tanto nos acosan y nos persiguen con soberbias y sobre todo con envidias.

--¿Quiere usted decir, don Angel, del Diablo?

-- Sí, sí, del mismo. Que usted, sin saberlo, lo llama en griego (diábolos) y yo prefiero llamarlo en arameo (Satán)

--¡Aaahhhh, Oooohhhh! –exclamó ella-.

--Y aquí finito, finito.



            

jueves, 21 de noviembre de 2013

"NIÑOS Y NIÑAS DE HOY", artículo del presidente de UNICEF-ASTURIAS, ÁNGEL NAVAL BALBÍN, con motivo del DÍA UNIVERSAL DEL NIÑO


Todos los niños y todas las niñas del mundo tienen los mismos derechos. Así lo establece la Convención sobre los Derechos del Niño (CDN) que ahora cumple 24 años, pero vivimos en un planeta de profundas desigualdades e injusticias que socaban los derechos más elementales de millones de niños.

Katerinetenía un hijo que enfermó gravemente. Vivían en una zona de selva y para llegar al hospital había que cruzar un río. Katerine no tenía dinero para pagar lo que costaba el billete del deslizador que cruza el río, y su bebé no sobrevivió. 

La pobreza provoca muertes como esta, que se pueden evitar. Y se consiguen evitar miles cada día, como revela la historia de Regina, en Mozambique, el tercer país más pobre del mundo. Tiene 22 años y tres hijos, su marido no tiene trabajo y cada día no es fácil sacar a la familia adelante. La buena noticia es que todos sus niños están vacunados contra varias enfermedades mortales, y no les ha costado nada.

En lugares como Filipinas o Siria, donde millones de personas se han quedado sin nada en terribles situaciones de emergencia, las familias huyen de los escenarios del desastre o del conflicto en busca de lugares seguros y sus vidas pasan a depender de la ayuda humanitaria.  

Es urgente salvar vidas, pero hablar de derechos humanos va mucho más allá. Supone hablar por ejemplo de participación en la sociedad, o de acceder en igualdad de condiciones a servicios básicos de calidad. Para lograrlo, la ayuda a medio y largo plazo es fundamental, porque va minando las raíces de la pobreza y construyendo sistemas básicos. Las organizaciones como UNICEF trabajamos día a día en esos dos frentes: brindando el apoyo necesario para la supervivencia, y en programas a largo plazo para el desarrollo sostenido de comunidades y países.

Es un trabajo de todos que suma grandes logros gracias, en primer lugar, a los propios gobiernos y comunidades de países con pocos recursos que deciden que la infancia es una prioridad, y a las miles de ONG y entidades públicas y privadas que trabajan por la infancia en los rincones menos afortunados de la tierra. 

Este esfuerzo mundial no sería posible sin el decidido y sostenido apoyo que, desde los países con más recursos, prestan personas, empresas, administraciones públicas, fundaciones, medios de comunicación y entidades de distintos ámbitos. Por eso todos tenemos motivos para celebrar los avances para los niños y sentirnos partícipes de los progresos para su supervivencia y desarrollo.

Hay muchas estadísticas que demuestran esos avances y, entre todas ellas, destaca, por lo que supone en vidas salvadas, la reducción de la mortalidad infantil en un 47%  en 22 años. Este porcentaje significa que entre 1990 y 2012 se ha evitado la muerte de unos 90 millones de niños menores de cinco años.

Lamentablemente, a pesar de los avances, 18.000 niños mueren cada día porque sus familias no tienen medios para garantizar su subsistencia: la desnutrición está detrás de la mitad de estas muertes, como causa indirecta y, junto a ella, de forma directa, enfermedades como el sarampión, la neumonía o la diarrea. No hay crisis que lo justifique.

Son situaciones extremas, de hambre, de guerra, de vida o muerte. En otras partes del planeta, en el mundo rico, los niños también necesitan que sus derechos se vean plenamente cumplidos. En España, que es la economía número 14 del mundo, la pobreza infantil ya supera el 27%, con más de 2,2 millones de niños que viven por debajo del umbral de la pobreza, sufren distintos niveles de necesidad y riesgo de exclusión porque sus familias no tienen ingresos suficientes para mantener los niveles de bienestar que deberían ser accesibles para todos en un país como el nuestro.

Todos, en cualquier lugar del mundo, en cualquier momento y en cualquier situación, tienen exactamente los mismos derechos. Sigamos luchando por ellos.

En Asturias lo hacemos: las organizaciones de infancia, los miles de socios y colaboradores que nos apoyan, empresas, fundaciones, administraciones públicas, el Parlamento, los medios de comunicación y entidades de distintos sectores (la cultura, el deporte…) para, juntos, promover los derechos de todos los niños y niñas. Gracias por este compromiso de todos.

ÁNGEL NAVAL BALBÍN
Presidente UNICEF Asturias


martes, 19 de noviembre de 2013

"DIVORCIADOS VUELTOS A CASAR Y COMUNIÓN (III)", artículo del notario ÁNGEL AZNÁREZ publicado en "RELIGIÓN DIGITAL"

3ª PARTE

                                                     AHORA, LO PASTORAL

                                                                         Solo se ve aquello que se mira.
                                                                                 (Merleau-Ponty)
                                             “El ojo y el espíritu” (ed. Minima Trotta, 2013, pág. 21) 

En la 1ª y 2ª  parte se separaron lo jurídico, lo pastoral y lo sacramental en el tema  de la Eucaristía de divorciados, casados de nuevo; ahora, de entrada, sobre aquel tríptico, deseo matizar. Estoy convencido que el clasificar y el poner el 1, 2 y 3, o la A), B) y C), son meros recursos o técnicas para tratar de entender la realidad de las “cosas”;  son recursos o artificios para comprender, para entender con más facilidad, si bien lo nuclear y esencial es uno, que muchas veces se esconde a los ojos del ver. Hay clasificaciones que hicieron historia, por ejemplo, las de Aristóteles, que tan aficionado fue a ellas, no obstante, me .declaro monista.
¡Qué cosas hay que ver!

He de relativizar, pues, la clasificación entre lo jurídico, lo pastoral y lo sacramental: lo esencial y único es la Salvación y el Reino, el de Dios. A manera de ejemplo, discuto una clasificación que ha hecho fortuna: la del fondo y la forma. ¿Dónde está la diferencia –es un ejemplo- entre el fondo y la forma en un consentimiento, en el matrimonial o en el testamentario. El consentimiento es declaración de voluntad, que nace en el interior y que se manifiesta en el exterior donde ha de ser recibida (declaración recepticia). El interior querido tiene una envoltura protectora, que, cuanto más protectora, más garantiza lo realmente querido.

Quien recibe, sea (por ejemplo) sacerdote o notario, una declaración de voluntad -el fondo-, en caso de no respetar el cauce protector –la forma- será cómplice de atropellos al verdadero querer. Un notario, embarullador o atolondrado, será responsable de que el papel firmado por un testador, nada tenga que ver con su verdadera voluntad mortis causa. No es posible, a mi juicio, un fondo sin forma. Por ello mi ortodoxia en lo litúrgico, que nada tiene que ver con espectáculos teatrales o de mimo (algunos ritos tridentinos).
 
"Ovejas mirando al dueño que no es el pastor"
Al Código de Derecho Canónico, para el consentimiento (el fondo) le basta con que no haya ignorancia en lo básico del matrimonio: un consorcio permanente entre un varón y una mujer, y para la procreación. (Es curioso que un Código tan preciso y en materia tan concreta, la matrimonial, añada lo de la prole a la procreación, que es defecto por redundancia ¿hay procreación sin prole? y que sea tan indefinido en lo sexual: una cierta –dice- cooperación sexual -cooperatione ALIQUA sexuali-. Más adelante, en el canon 1108, número 2, se determina, correctamente, la forma: “…El asistente (Ordinario, párroco, sacerdote o diácono delegado), que, estando presente, pide la manifestación del consentimiento de los contrayentes y la recibe en nombre de la Iglesia”.

Y ¿qué es lo pastoral? A dicho efecto, pensando naturalmente en el tema que nos ocupa -calificado por el Arzobispo G. Müller en su La Forza della grazia de problema pastorale di vasta portata; il piu grave problema pastorale- escribiré dos apartados; el segundo el más importante.

Primero: Es lo pastoral también un ministerium de Jesucristo, luego de la Iglesia; pero sin los límites tan imperativos y fijos como lo jurídico y lo sacramental. Es más elástico o flexible. Por ello los papas siempre han tratado de tensar o centrarlo. Juan Pablo II, cuya doctrina sobre el matrimonio es muy interesante, digna de estudio, en su Discurso a la Rota Romana el 18 de enero de 1990, a propósito de la inseparabilidad en la Iglesia de lo jurídico y pastoral, advirtió:” No es verdad que para ser más pastoral, el derecho deba ser menos jurídico. El Papa Benedicto XVI, en su primer Discurso a los miembros de la Rota romana el 28 de enero de 2006, después de destacar que las sentencias eclesiásticas (nulidades), pueden influir en que muchos fieles pueden o no recibir la Comunión eucarística, denunció una oculta y supuesta contraposición entre derecho y pastoral. Eso es muy interesante, para no olvidar; pero se debe recordar también lo escrito en la 2ª parte: un “forzar” lo jurídico, puede ser peligroso para la propia Iglesia, que ha de ser cuidadosa con “privilegio concordatario” (?), como pudiera ser el asunto de la eficacia civil de las sentencias canónicas de nulidad (otras confesiones religiosas carecen de él).


El Papa Francisco, volando de Río a Roma, en relación a la Comunión de los divorciados vueltos a casar, arriesgó mucho hablando únicamente de la pastoral matrimonial:” hay que tratarlo –dijo- en la pastoral matrimonial profunda”. Un mes después el Arzobispo Prefecto G. Müller, en su artículo de L´Osservatore Romano, parece que quiso dejar las cosas más próximas al sitio debido. Y al Papa Francisco volveremos más adelante.

Segundo: Lo pastoral es esencial en cuestiones matrimoniales, pero no se basta; excluido lo jurídico, queda lo sacramental. Y es esencial pues el ministerio pastoral no tiene otra finalidad que Jesucristo, que reiterativamente repitió: “Yo soy el Buen Pastor”. Y por Jesucristo vino la Salvación y el Reino de Dios, que todo lo demás es instrumental.

En este mismo año (Éditions du Cerf), se ha publicado el magnífico Dictionnaire Encyclopédique d´Éthique Chrétienne, bajo la dirección de los profesores Lemoine, Gaziaux y Müller. Me interesó especialmente la voz Salut (Salvación), a cargo de Olivier Riaudel (páginas 1803 a 1811). Después del estudio etimológico, se analizan las diferencias sobre su sentido (Salvación) en el Nuevo Testamento, terminando con la elaboración de una reflexión (nueva) sobre el Cristo Salvador. Un Cristo –se lee- que anuncia la salvación a los que acoge en su llegada (conversión de Zaqueo); que salva en situaciones de impasse (la mujer adúltera), y que purifica de las enfermedades (la lepra). Y un San Juan que, en su Evangelio (3,17), escribe: “Dios no ha enviado a su Hijo al mundo para juzgarlo, sino para que el mundo sea salvado por él”.
 
 "Desgarro de mujer"(Jerusalem)
Y ahora volvamos al Papa Francisco: desde hace años vengo denunciando –en ocasiones mal comprendido- el fenómeno contemporáneo de la denominada “papolatría” (adoración a los papas), muy del siglo XX y del XXI. Y lo denuncié porque es una manera de idolatría, que es un pecado; un pecado muy grave si se es fiel a la Historia Sagrada (el mismo Papa Francisco no deja de denunciarlo). Pues bien, del mismo modo que no me agradaron en exceso las palabras del Papa en el avión, regresando de Río de Janeiro, por sus imprecisiones (tampoco me gustaron las de mi bendito Benedicto en el avión con destino a Camerún y Angola en el año 2009), en la mañana del último 3 de noviembre, por la predicación previa al Ángelus de ese día, el Papa Francisco me conmovió. Fue una maravilla de predicación, que, por ser eso, la grabé, y a la que volví varias veces.

Fue con ocasión del episodio evangélico (San Lucas) de la conversión de Zaqueo, que, como dijo el Papa, era “una oveja perdida, despreciada, un ex comunicato”; Jesús va a la casa del pecador y los habitantes de Jericó le critican por eso -¿cómo entra en la casa de un pecador? se preguntaron-. Y el Papa añadió:” Dios no olvida a las personas que ha creado, es el Padre, siempre vigilante…Jesús, reconociendo el deseo de Zaqueo de acercarse, se puso a su lado, y con su perdón hizo más fácil la conversión”. El Papa Francisco terminó su predicación: “¡Jesús no te desilusionará, no deja de perdonar, perdona siempre. Lasciati guardare da Gesù”! (con gesto de firmeza).

Para analizar el tema de la pastoral matrimonial, en referencia especial a los divorciados vueltos a casar y con deseo de Eucaristía, tenía preparadas citas del Magisterio conciliar y de los papas, empezando por Pío XII. Incidentalmente digo: vuelvo a reivindicar la lectura de los documentos de Pacelli, de muy alto nivel y olvidados; un Papa jurista, que precisamente por ello fue equilibrista, de piruetas en el suelo, tan equilibrista que se pasó en lo del espinoso tema de sus silencios respecto a los judíos; el Papa Benedicto, por teólogo, es un trapecista, de piruetas en las alturas, siendo su renuncia de eso, de trapecista y no de equilibrista-. ¡Cómo no entender a Pio XII, jurista, que en mi propio trabajo de tal –aunque modestísimo- no hago otra cosa que debatirme continuamente entre la ética de convicción y la de responsabilidad (Max Weber)!
 
"Un muro terrible, que es escultura" (Jerusalem)
La predicación del Papa Francisco hizo innecesarias aquellas citas. Uno puede “ver” –prodigio de la inteligencia- al pecador Zaqueo subido, ridículamente, al árbol sicomoro (higuera salvaje), y también puede “ver” al Hijo de Dios pidiendo que se acerque para darle la mano salvadora. Por ello, por ello,  uno puede imaginarse también a un pecador que quiere comulgar, y no se imagina a Jesús diciéndole NO. Ese sería el no de los escribas y fariseos, o sea, el de los presuntos guardianes de las esencias y de la Ley.
La clerecía y la jerarquía de la Iglesia, una Iglesia que, precisamente, es sacramento fundamental de salvación (SIGNO de SALVACIÓN), no puede desempeñar el papel de aquellos guardianes. Claro que para ello, en la jerarquía católica ha de separarse lo que es ministerio o servicio pastoral de lo que es poder puro, en el significado más detestable: afán mundano de mando y de dominación sobre los demás y sus conciencias. Falta harán “sanitarios” para limpiar roñas, y fístulas pestíferas y/o ponzoñosas.

¿No es, por otra parte, esencia del cristianismo (no así del judaísmo) que la Fe y la Gracia son dones gratuitos de Dios? ¿La fe cristiana no es un hecho divino, es decir, un acontecimiento en el que Dios tiene la iniciativa, que va de Dios al hombre (Teología) y no del hombre a Dios (Antropología)? Sobre esto, sin poder extenderme ahora, remito al filósofo, antropólogo y “profeta” judío Yeshayahou Leibowitz.

No tengo duda que por exigencias pastorales, los divorciados y vueltos a casar pudieran recibir la Eucaristía; pero pido cuidados. Ya escribí en la 1ª parte, que el rigor y no las “trágalas” son necesarios. A dicho efecto “lo sacramental” es necesario, la doctrina sacramental cristiana, que ha de abrir la vía a lo necesario pastoral. Unos sacramentos que “divididos” en siete (Concilio de Trento) –para entendernos- son uno: Don de Dios en Jesucristo para el Reino. Regreso, pues, al monismo proclamado al principio.

Para lo sacramental (varios sacramentos están implicados), tema de la 4ª parte, viajaremos a Freiburg im Breigau; nos encontrarnos con Karl Rahner S.J.


Las fotos  de las ovejas y de la paloma fueron realizadas por el autor el 1 de noviembre de este mismo año. Si el lector, curioso, quisiere saber en qué exacto lugar, deberá releer la Respuesta en forma de carta a María Luisa. Las fotos de la esculturas las hizo el escribiente en una de sus frecuentes estancias de estudio en Jerusalem, cerca de un museo muy importante para el mundo judico.

domingo, 17 de noviembre de 2013

"DELANTE DE LA ESTACIÓN DEL VASCO" artículo del notario ÁNGEL AZNÁREZ publicado en la edición de Oviedo de "LA NUEVA ESPAÑA"


(17/11/2013)
          Muchas veces vi acercarse el tren Vasco desde  La Manjoya, imperioso, lanzando la máquina, negra y zumbona, humos de vapor, fugaces como voladores; con menos fuelle ya cerca de La Pedrera, y como el Ratoncito Pérez cuando entraba en el túnel de San Lázaro, que no era túnel sino una alcantarilla. Muchas veces, para acercarme a la vía, salté tapiales de prado y pisé sebes, en las que rocé ortigas y espanté avispas que a mí venían a picar, mirándome y viéndome flor. Lo que fueron prados hoy son buildings, grandes buildings, que los levantaron los del “acabose” inmobiliario, ya acabados.
“Un vagón casi como el del Vasco”
(de la colección de trenes del autor)

Ya debería tocar subir al tren, pero no sé, no sé; no sé si será hoy u otro día, que ya se verá al final. La subida al tren y el viaje fueron  a causa de una excursión escolar al monte de La Magdalena, el que está delante del Aramo. La Magdalena, “monte sagrado”, siempre fue más de los carbayones que del resto de astures -los de Gijón siempre prefirieron tirarse al mar, mojándose todo, todo, incluso la parte más animal de su autonomía (el culu moyau), con U de dativo latino (para dare).

A propósito de los dativos, se me ocurre un lema, turístico, que a ver si aprenden los de las nuevas profesiones, esos creativos, organizadores de eventos, gestores de suelos y de bajos vuelos: “Gijón, ciudad de dativos; Oviedo, ciudad de genitivos y Cangas de Narcea, por los muchos ruidos y bocazas, villa de vocativos”. Pero centrémonos y volvamos a lo nuestro, a la entrada de la Estación, que esta escritura, alegre, es propensa a los enredos como los de los cerezales dulces y a algún que otro carajal, de fruto amargo.

  Comprenderá el lector/lectora  la emoción que -como se dice ahora, en tiempo de tantos embargos y embragues-, embargaba al viajero, que, por primera vez, iba a subir al Vasco, que tanto miró. Una emoción más sentida que la de London al subirse al Orient Express, años después, con destino a Constantinopla, para terminar comiendo hojaldres calientes, exquisitos, en un Cuerno de Oro.

Antes de bajar a la profunda sima -que eso era el andén del Vasco en Oviedo desde la calle Jovellanos- los viajeros, aún no mozos y siempre en fila como la de los indios, se reunieron delante de la Estación, en la calle Jovellanos, teniendo a la vista el comercio de instrumentos musicales “Sucesora de Víctor Sáenz”, pegante a la confitería de Camilo “y” Blas (siempre del 2x1), surtida de imponentes tarros de cristal con melocotones en almíbar, que curaron sarampiones y escarlatinas. Digamos que Camilo “y” Blas, en Oviedo, siempre fue, además de confitería, una botica.
 Donde estuvo “Sucesora de Víctor Sainz” en la calle Jovellanos de Oviedo
Aclaro con precipitación y precipicio, en un único punto y aparte, que aquel Jovellanos nada tuvo que ver con Jovellanos XXI, tan de actualidad, en el que pretendieron edificar un Beverly Hills de Hollywood o una Torre de Babel mesopotámica. El color resultó marrón, como el papel de estraza marrón, envoltorio de barajas, barajas de oros y espadas.

No obstante la emoción, miraba con hosco semblante a la “Sucesora de Victor Saenz”, a la tienda, no a Pilarina, que era la sucesora, ni a Paquita que era la factora mercantil; ambas ninfas y “mujeres que eran un cielo” como decían las cursis del british Club de Tenis. Y qué de panderetas vendían las ninfas en una ciudad, Oviedo, de tan poca pandereta, aunque de bastantes panderos. La historia fue que por Reyes me regalaron una bandurria, que nunca quise –aquí a mi lado la tengo y llamo la malquerida-, y no un laúd que siempre quise y nunca tuve ¡Menos mal –exclamo hoy- que tales contrariedades me ocurrieron con instrumentos de cuerdas y no con el otro, también de cuerdas y de vientos, de vez en cuando! Bandurria canija y grillera, de mucho gri-grí, y laúd poderoso y más ronco que los grillos. Y en este momento preciso “saco” del olvido a un personaje importante de la música, la menor, de aquel Oviedo: don Jesús González López.

“Bandurría La Malquerida"
El bueno de don Jesús fue mi profesor en la orquestina o rondalla (y un entre paréntesis importante: lo que seguirá trata de que con la descripción, el lector o lectora vea sin interferencias la película de los hechos, sin el mínimo deseo de indelicadeza hacia una persona ausente que aprecié). Don Jesús –digo- siempre con el pelo cortado al cero, era de cabeza redonda como una O, sin cuello, con gafas de gruesa montura y con orejas como abanicos; también era ancho de espaldas, con barriga de Buda, y con unas piernas cortas, delgadas como alambres en arco.

 Para impartir las lecciones, primero subía a una tarima, luego subía a una banqueta –un autentico músico de aupa-, y desde allí, cerca del crucifijo áulico y del retrato del Beato Marcelino, dirigía con su laúd a la orquestina. En la primera fila estábamos Pepín González y su laúd, el hijo de Pepe Ge., de Turón y de la Caja de Ahorros, y yo con mi bandurria, que  aburrido como ostra, le daba con fuerza a la púa triangular rompiendo las cuerdas. En la última fila estaban los preferidos de don Jesús, los veteranos Pedro Cid Viña y Félix García Díaz, éstos guitarristas.  
“Pensador: ¿Quién soy yo?"
Desde mi bajura, veía la imponente figura de don Jesús, allá en lo alto, y siendo el escribiente muy entendido en Historia Sagrada desde la cuna -ahora de eso los niños nada saben nada, que es básico para Ciencias y Letras-, miraba a don Jesús y dudaba: ¿será un nuevo Jonás, recién salido del vientre de la ballena, camino de Nínive, o será Melchisédech, rey de Shalem, el amigo de Abraham?

Aunque siempre fui músico de orquestina, lo que quería era tocar la marcha triunfal del caballero “Tannhaüser”, que me excitaba tanto; pues nada, nada, ni hubo manera ni forma. A lo más que llegué fue a poner músicas al himno del Auseva, que empezaba con un Allegreto “Auseva faro de gloria, Auseva cuna de historia” y que terminaba con un Lento, muy lento: “ El Coléeegio, mi páaaatria, mi féee, mi ilusiooón” -¡Jolín, y me entero ahora, lo que me perdí!-. Y que conste que dimos conciertos en sitios de postín, como en el Casino de Trubia, que nos invitaron a Cola Cao y a galletas María ¡Manda huevos!

El director de la orquestina era el Hermano Marista Fabián Alonso Clemente, el cual tenía un rasgo sorprendente: era natural de un pueblo del Páramo leonés, no obstante ello, era rubio como son los rubios de verdad, sin teñidos, sin pelos rojos ni azafranado. Cuando años después me explicaron la repoblación de las tierras leonesas por los astures –la presura, según don Ignacio de la Concha- siempre añadí: “y por teutones merovingios”. Confieso que de los merovingios no sé nada, nada, pero esa palabra siempre me gustó, y tanto, que si tuviera otro hijo, le llamaría Merovingio, don Merovingio Aznárez, que suena como un laúd, no como el sobrino “bandurrio” del Marqués de la Rodriga, que se llamó Julián, que fue de mucha caña por Cañedo y muy largo por Longoria. Y, para el colmo, fue torero, el torero de la calle Campomanes, la mía. Cañedo, Caunedo, Caunedo y Cañedo, torerazos.   

Lo de la repoblación del Páramo leonés, me lo enseñaron con lo de la “Monarquía Asturiana”, que tanto interesa a historiadores, a románticas y a fabuladores; y también a los vetustos del RIDEA, que, por ser más de dos, no llamo “Duo-Dinámico”. Y además al canónigo Hevia Ballina –“¡ppppsssss, venga aquí, no se me escape,  que no hay manera de sacarle los colores, pues siempre los tiene fuera…!”-.
“Un capotín para torerazos”.

Es que el buen canónigo con líos de archivos y yo compartimos muchas cosas: a ambos nos gusta Villaviciosa; tenemos ambos canonjías de fe, que la suya, por ser de catedral, es “como Dios manda” y que la mía, por ser pública es “como el diablo manda”. A propósito, esto de fedatario público me está creando problemas, pues por ser eso, resulta que soy escriba y publicano, o sea, lo peor de lo peor según el Santo Evangelio (si fuera mujer fedataria, sería, a buen seguro, la adultera, la de las pedradas de hipócritas ¡ufff, ufff, qué de hipócritas, ayer y hoy! Y por último, comparto con el reverendo Vallina el mismo periódico, si bien él se ubica o lo ubican en la parte trasera y yo en la delantera, del periódico, del periódico.

Llegados aquí, ya sabemos que hoy no subimos al tren, que ya lo perdimos y marchó. Lo cogeremos, sin dudarlo, próximamente, que lo dedicaremos al Vasco, al tren y sólo al tren, tan de Oviedo. Un aviso: el destino último será un apeadero, muy cerca de La Magdalena; haremos parada antes, en Fuso, en Fuso de la Reina, de interés por ser estación de trasbordos.  
Libro del torero de la calle Campomanes Julián Cañedo Longoria y dedazo del autor

LAS FOTOS HAN SIDO FACILITADAS POR EL AUTOR

  

sábado, 16 de noviembre de 2013

ÁNGEL AZNÁREZ ANUNCIA Y PROMETE:

El próximo domingo, 17 de noviembre, se publicaran en medios de comunicación (de diferente naturaleza) artículos de su autoría.  

Aquí se publicará uno, el domingo; a los pocos días otro, y así, sucesivamente, en sesión continua, como en los cines de barrio.
 

En todos ellos, LA FE es importante.   En el que se publicará en Religión Digital, se termina con dos letras jesuíticas: S.J. 

viernes, 15 de noviembre de 2013

"CONFERENCIA EN GIJÓN: ENTUSIASMO POR LA ENCUESTA PAPAL", artículo publicado en RELIGIÓN DIGITAL por su director, JOSÉ MANUEL VIDAL

Gallegos y asturianos, primos hermanos. Independientemente de quiénes sean los primos y los hermanos (eterna disputa galaico-asturiana), la verdad es que un gallego se siente en casa entre asturianos. Así me sentí ayer en el Ateneo Jovellanos de Gijón, donde estuve pronunciando una conferencia sobre el Papa Francisco y su primavera. Con una sala llena, unos presentadores de lujo y un interesante debate posterior con los asistentes.

La figura del Papa Francisco ilusiona y actúa como un imán. Contribuir, en la medida de mis pobres posibilidades, a esa oleada es un placer. Me encanta explicarle a la gente qué es lo que ha pasado, está pasando y puede pasar en el Vaticano del Papa del fin del mundo. La gente quiere saber, se hace preguntas y busca respuestas.
Tras la acogida del presidente del Ateneo, Álvaro Muñiz, un emprendedor orgulloso de su patria chica y de los logros que están consiguiendo en diversos ámbitos, y de Isabel, su eficaz secretaria, pasamos a la conferencia. En la mesa de presentación, Fidel García Martínez, directivo del Jovellanos, que puede presumir no sólo de saber cosas del Papa, sino de haberlo conocido personalmente en Buenos Aires, cuando era sólo obispo auxiliar del cardenal Quarraccino.
José Manuel Vidal, Fidel García y Ángel Aznárez
El presentador oficial, nuestro colobarador, el prestigioso notario Ángel Aznárez. Un notario que, además, es un gran teólogo de la política (siguiendo las huellas de su maestro Karl Smidt), que sigue la actualidad del Vaticano al día y que está tan bien informado de los intríngulis eclesiásticos de aquí y de allá que suelo bromear con él, diciéndole que pertenece a varios servicios secretos.
Lo que más me llamó la atención, en el debate posterior, fue el entusiasmo de la gente ante el cuestionario sobre la familia y la moral sexual enviado por el papa a los fieles y a los obispos de todo el mundo. Por vez primera, la gente se siente parte de una Iglesia-pueblo de Dios, a la que el Papa quiere consultar, pedir su opinión. La gente está deseando participar. Encantados de coaborar, para que al Papa le llegue el "sensus fidelium". Sin filtros, sin intermediarios.
Porque, escarmentada, la gente no se fía de los filtros ni de los intermediarios. Creen que las respuestas no van a llegar a través de la Conferencia episcopal. O van a llegar, pero "cocinadas". Y piden otros canales de salida o de llegada de las respuestas.

Público en el salón de actos del ATENEO JOVELLANOS
Desde RD les ofrecemos ese cauce. No para sustituir a otros, a los oficiales, ni mucho menos. Sólo para sumar y aportar y multiplicar el efecto, novedoso e inédito, de la consulta papal a las bases, al pueblo de Dios. Gracias a los amigos de Gijón.
La estancia en tierras asturianas tuvo otro broche de oro: una larga conversación con Don Gabino Díaz Merchán, el arzobispo emérito de Oviedo. A sus 87 años, con sus achaques, pero con una mente lúcida y despierta. Conversamos largo y tendido sobre su infancia (el asesinato de sus padres, cuando tenía sólo 10 años), la reconciciliación, el Concilio, Tarancón, su éopoca de presidente de la CEE y la ilusionante etapa que se abre en la Iglesia con el Papa Francisco. Pronto editaremos la entrevista. Una gozada poder conversar con una referencia y toda una autoridad moral del episcopado y el único obispo vivo que asistió a la cuarta sesión del Concilio Vaticano II. Memoria viva de la Iglesia conciliar, postconciliar y de la Transición española. Gracias, Don Gabino.





José Manuel Vidal