miércoles, 8 de septiembre de 2010
"SEGUIDORES" DE LAS MIL CARAS DE MI CIUDAD
Me llegan al correo las entradas que se hacen a mi blog, y esa alerta es la excusa para entrar en él, ya que no lo hago todos los días. Sólo aquellos en los que me siento con ánimo –y tiempo- para escribir algo nuevo. Brujuleo, eso sí, cada día en los medios de comunicación por ver si hay algún artículo que me guste y puedo facilitarlo a quien tenga a bien asomarse a esta mi ventana virtual. No controlo, ciertamente, quienes leen lo publicado, el contador de visitas me dice que, en todo caso, son más lectores/as de los que yo podía esperar. No obstante, soy plenamente consciente de que el número es insignificante comparándolo con otros blogs, a los que acceden –según me han dicho- millones de personas. Y, para ser sincera, eso me da hasta un poco miedo. Vivo de cosas pequeñas, en una ciudad afortunadamente de provincias, con amigos a los que llamo por el nombre -porque tampoco son demasiados-, conozco a todos mis vecinos, sé cuando uno está enfermo, cuando se le casa la hija, cuando nace un nieto, compro en la tienda de barrio de toda la vida…Todo muy de andar por casa. Por eso me cuesta entender este efecto multiplicador –hasta el infinito, posiblemente- que supone la Red. Pero aquí estoy, colaborando con mi granito de arena. Si alguien me preguntara por qué, no sabría responder. Y viene todo esto a cuento porque hoy se ha añadido un nuevo “seguidor”, que esta vez resulto ser seguidora: Cani. No hace mucho se incorporó Sebastian, también El Richi, y Neriarod, Miguel Torreblanca, Héctor Alejandro….Aparecieron todos así, sin más, un buen día se hicieron seguidores. Nunca les di la bienvenida, ni tan siquiera sé si es habitual hacerlo. Nadie nos ha presentado, ni probablemente nos conozcamos nunca, pero ya hay algo que nos une. Gracias, por leerme, gracias por asomaros a Las mil caras de mi ciudad.Si las cosas pequeñas os gustan, si la vida cotidiana sencilla también: consideraros en vuestra casa.
Debieran de declarate "Bien de interes social"¡¡¡¡¡yo seguire entrando cada dia por el placer de leerte¿Sabes que tus reflexiones reconfortan? Campoamor decia:"Como me gustaria tener el don de la palabra"
ResponderEliminarNo se puede imaginar el "anónimo" del comentario anterior lo que me he reído con él. Me habían dicho muchas cosas, unas mejores que otras, pero lo de "bien de interés social", pues como que no. Nunca me había sentido yo como la fuente de la plaza del pueblo,los bancos del parque, la Bernarda (que siempre se dice siempre fue patrimonio de todos y, por tanto, bien de interés general- lo de social ya lo dejo a criterio de cada cual-. ¡Qué mal pensados, que no lleva segunda intención!, sólo pretendo una sonrisa, me arriesgo a que sea maliciosa)Y todo lo demás que puede ser considerado de interés, eso: social. Pobre Isabelita, ¡qué cosas le dicen! Todo sea en aras al buen humor.
ResponderEliminarPrecisamente se trataba de eso,de hacerte reir pero tambien decirte en clave de humor lo bien que me siento leyendo tus cosas.
ResponderEliminarsólo para repetir lo que ha escrito ANÓNIMO pues siento lo mismo que él, que tus reflexiones recorfortan ¡ y cómo! ¿Y el don de la palabra?
ResponderEliminarSabes que espero (y por favor no tardes) ver en los escaparates de las librerías el libro de ISABEL MORO